Los recursos educativos son materiales o herramientas didácticas que ayudan a los niños en su aprendizaje, facilitándoles la asimilación y comprensión de conceptos y despertando su interés. Aunque este tipo de ayuda es especialmente útil en la etapa de Infantil y primeros cursos de Primaria, -pues es cuando los niños comienzan a adquirir la base que les ayudará a desarrollar otras habilidades más complejas para su aprendizaje escolar futuro-, lo cierto es que los recursos educativos son una herramienta fabulosa a cualquier edad.
De todas las asignaturas escolares, las matemáticas son, por lo general, una de las materias que más cuesta a los niños, por lo que hoy queremos proponerte un repertorio de recursos educativos para que nuestros niños aprendan mientras se divierten; porque a partir del juego y/o la manipulación, los niños pueden aprender mucho más de lo que podemos imaginar.
Bloques de Lego
Ya hemos hablado de ellos en alguna ocasión, y es que los ladrillos de construcciones tienen un valor educativo intrínseco, porque a la vez que juegan, los niños están desarrollando su organización espacial, creatividad y capacidad de concentración.
Aplicados al campo de las matemáticas, estos bloques de plástico ayudan al niño a entender conceptos matemáticos, tanto simples, como sumas o restas, hasta conceptos más complejos como fracciones y cuadrados.
Bloques geométricos
Los bloques geométricos de madera ayudan al niño a introducirse en los conceptos de la la aritmética básica, como patrones, simetría, medición lineal y de área, además de introducir el concepto de fracciones y resolución de problemas. Su uso está recomendado a partir de los cinco o seis años y puede extenderse incluso hasta primeros cursos de Educación Secundaria.
Bloques lógicos
Los bloques lógicos están especialmente indicados para los niños de Educación Infantil y primeros cursos de Primaria. Se trata de fichas de madera o plástico con diferentes formas geométricas y tamaños, que ayudan al niño a desarrollar el pensamiento lógico, adentrándose en el mundo de las series y las clasificaciones por tamaño, forma o color.
Tangram
Similares a los bloques lógicos y geométricos destaca también el Tangram, un sencillo juego que ofrece una gran versatilidad, pues permite al niño poner a prueba su creatividad e imaginación al tiempo que analiza formas geométricas, dimensiones y relaciones espaciales. Especialmente recomendado para niños a partir de los tres años.
Ábacos
El ábaco es un instrumento de cálculo manipulable especialmente atractivo para los niños más pequeños, ya que les ayuda a entender de forma sencilla las operaciones matemáticas de números naturales (sumas, restas, multiplicaciones y divisiones).
Existen diferentes tipos de ábaco, aunque el más conocido quizá sean el horizontal, que consisten en un panel de alambres con cuentas o discos de colores, especialmente indicados para niños a partir de los seis años.
También puedes encontrar ábacos verticales con discos de colores, que al igual que los horizontales, ayudan al niño a aprender a contar, seriar y realizar operaciones básicas sencillas.
Regletas de madera
Son ideales para trabajar los números y la comprensión de las operaciones, por lo que pueden utilizarse desde los tres años (siempre con supervisión porque las hay de tamaños muy pequeños) hasta incluso la adolescencia.
Tienen un tamaño creciente sobre la base de la unidad, y permiten que el niño se vaya familiarizando con las proporciones y los números de manera lúdica, usando los diferentes tamaños para jugar libremente o realizando juegos matemáticos que podemos proponerles. Pueden formar series del uno al diez, comparar cantidades y sumar. A través de la manipulación asimilan conceptos como mayor y menor o las propiedades de la suma, pues es muy práctico el convertir a las cantidades en algo que pueden tocar.
Material base 10
Este tipo de material, fabricado tanto en plástico como en madera, es perfecto para ayudar a los niños a comprender el sistema decimal, iniciarles en los números naturales o facilitarles las operaciones de cálculo mental. Puede utilizarse desde preescolar (con supervisión porque contiene piezas pequeñas) y hasta cualquier curso de Primaria.
Policubos
Los policubos son muy similares a las regletas, ya que sirven para introducir al niño en el mundo de los números, las operaciones aritméticas básicas y la composición y descomposición de números. Pero además de resultar perfectos para los primeros años de la infancia, los policubos también pueden aplicarse a la etapa de Educación Secundaria, pues permiten realizar otras actividades más complejas relacionadas con la geometría o la estadística.
Tienen colores diferentes que coinciden con los de las regletas de Cuisinaire, y pueden ensamblarse por todas sus caras, lo que permite además desarrollar la creatividad y la imaginación a la hora de elaborar diferentes figuras.
Tabla matemática Montessori
Esta tabla matemática Montessori contiene un panel y fichas de madera con los números del 1 al 100, para que los niños más pequeños vayan familiarizándose con la secuencia de números y practicando una amplia variedad de ejercicios de memorización, lógica y habilidades matemáticas.
Caja de operaciones matemáticas Montessori
Esta caja de matemáticas Montessori fabricada en madera, permite a los niños más pequeños desarrollar su capacidad cognitiva numérica gracias a los 15 símbolos que contiene, 19 números y 43 varillas, ideales para comenzar con el aprendizaje de los números y las operaciones matemáticas sencillas.
Materiales para el aprendizaje de fracciones
Las barras para el aprendizaje de fracciones son de gran utilidad para entender este concepto y adentrar a los niños en las operaciones de fracciones. Se trata de barras fabricadas en diferentes materiales, similares a las regletas, cada una de la longitud y color diferente, en función de la fracción que represente.
Y con la misma finalidad pero en formato redondo encontramos también estos círculos (elaborados en diferentes materiales ), perfectos para ser utilizados para entender las fracciones y sus operaciones.
Juguete de aprendizaje aritmético
Este sencillo juguete multifuncional consistente en un tubo con números y símbolos rotarios en su superficie, permite a los niños más pequeños practicar de manera divertida y en cualquier lugar las operaciones aritméticas y los conceptos de mayor y menor. Basta con girar cada uno de los cuerpos para poner en práctica todo lo que saben, al tiempo que estimulan su motricidad fina y su coordinación óculo-manual.
Tableros para geoplano
Los tableros para geoplano son una forma muy visual de comprender conceptos como la perpendicularidad y el paralelismo y adentrarse en el mundo de la geometría básica, familiarizándose con las formas. Es ideal para niños a partir de los tres o cuatro años.
Set de recipientes para medición volumétrica
Entender los volúmenes y la capacidad será más sencillo gracias a este set de recipientes para medición volumétrica. Incluye cinco vasos de boca ancha, de 50 ml, 100 ml, 250 ml, 500 ml y 1 litro. Perfecto para que los niños experimenten con las capacidades, midan y comparen, asimilando de una manera más visual y rápida todos estos conceptos.
Juegos de mesa
Son muchos los juegos de mesa que pueden ser de gran utilidad para repasar los números, el cálculo mental y las operaciones aritméticas básicas. En general, podríamos pensar en cualquiera que disponga de un dado y tablero y sea necesario contar, pero seguro que a la mente de todos se nos viene principalmente el ludo o parchis.
Pero hay muchos más juegos de mesa educativos que los niños pueden utilizar para aprender matemáticas mientras se divierten, como el clásico Bingo, el Dominó, el conocido Camelot, Damas, Ajedrez o las barajas o cartas españolasm entre otros perfectos para practicar el cálculo mental.
Sudokus
Y ya por último incluímos en nuestro repertorio a los sudokus, unos cuadernillos de ejercicios divertidos que suponen un reto y requieren de un esfuerzo mental para poder resolverlos, además de observación, memoria y concentración. A partir de los seis años los niños pueden comenzar ya a resolver sudokus sencillos e ir elevando poco a poco el grado de dificultad.
Fuente: bebesymas.com